Volviendo a los pases

Pasa que si te extraño es cosa mía,
y la dejo ser,
Pasa que todo sucede por alguna razón,
y si me quedo viendo el tren pasar me pierdo
de un mundo por conocer,
Pasa que hoy me atrapó la nostalgia,
Pasa que ya pasará.

Mia

Ella a estado ahí mucho antes de que yo naciera,
mucho antes de que yo lo pensara,
rodando de un lado a otro, en silencio,
llegaste a mis manos torpes, sin saber tu sonido,
pero, poco a poco aprendí a escucharte, pero nunca a entenderte,
las cuerdas fueron envejeciendo pero nunca se rompieron,
mi única herencia, firme y viva, que todo quien llega de visita admira,
siempre en silencio esta, aguardando fina y brillante, mi eterna compañía,
y tu recuerdo, papá, es lo que queda mientras suenen los acordes
de la guitarra, mía.

Aquella mañana, cuando te vi partir, las luces del ecenario se apagaron
Ni adios, ni hasta luego, solo un cruce de miradas que no quisiera saber que significaron,
tan sólo un recuerdo para el corazón,
tan sólo un momento para la razón.

Tarde de domingo, paseando
y vagando por Tepito, a lo lejos se escucha
la "guaracha sabrozona", y el olor a "esquites" es inevitable,
las "caguamas" ciculan con singular alegría, y mientras tanto
de un lado a otro observamos "fayuca" y decidimos si llevar
o no una bolsa Luis Buitron o una Guchi, aca la gente no distingue
de unos u otros acá todos somos iguales, y por lo mismo igual de vulnerables.

Al caer la tarde enfría un poco y todo se torna con luces de colores,
los puestos se iluminan con series navideñas y los tamales empiezan a rondar,
pero es hora de partir y otro día más se logró, hasta mañana mi ciudá.